Para mayo, la nueva Terminal C ofrecerá espacios más confortables,
nuevas circulaciones, servicios y seguridad. Qué criterios constructivos
se eligieron. Cómo sigue el plan de obras.
La obra Nuevo Aeropuerto Internacional de Ezeiza Ministro Pistarini, a cargo de AA 2000 en conjunto con Ernesto Gutiérrez Conte,
que comenzó en 2009 y concluirá en 2013, continúa a todo vapor. Tras la
finalización en noviembre pasado de la planta baja de la nueva Terminal
C , los trabajos apuntan ahora a culminar ese sector a más tardar en el
mes de mayo. El edificio completo, cuya construcción forma parte de la
etapa 1A , también incluirá áreas destinadas al servicio de extinción de
incendios, peaje e ingreso de vehículos.
Por las características
del emprendimiento, el proyecto fue elaborado en base a un criterio de
etapabilidad , de modo de organizar los plazos y avanzar sobre las
distintas áreas para no interferir en el funcionamiento del aeropuerto.
Así, la nueva planta baja de la Terminal C fue en un principio
habilitada para recibir los vuelos del Aeroparque Metropolitano Jorge
Newbery, que cerró sus operaciones durante 28 días a fines de 2010 como
parte de su propio plan de reformas. Una vez concluidas, la planta baja
de la nueva terminal se cerró para continuar con el resto del edificio.
Esta planta permitió extender la superficie de este sector a 7.500
metros cuadrados, sumando veinte nuevos puestos de check in y una sala
de pre embarque con cuatro puertas y dos cintas para retiro de
equipajes.
Del “lado aire”, las obras realizadas en siete etapas
incluyeron la duplicación de la superficie de la plataforma de carga,
que ahora supera los 72 mil metros cuadrados.
También hay nuevos
puestos de peaje y se construyó una calle de acceso directo desde la
Autopista Richieri y más de 1.200 nuevas cocheras.
La culminación
de la etapa 1A de la obra implicará la puesta en funcionamiento de la
nueva Terminal C, que reemplazará a su antecesora –ya demolida–, aquella
desde cuyas terrazas eran despedidos los viajantes hasta fines de la
década de 1960. Este nuevo edificio corresponderá al sector sur del
Aeropuerto, sumándose al esquema basado en un partido de varios
edificios parciales, sucesivos y conectados entre sí. La Terminal C
operará para tráfico internacional y cabotaje, presentando áreas
flexibles de acuerdo a la demanda. En cuanto a su volumetría, se trata
de una doble estructura horizontal en forma de “v” con el vidrio como
elemento predominante en sus fachadas. Una vez concluidas las etapas 2, 3
y 4, en 2013, Ezeiza será un gran complejo conformado por el hall de
check in de la terminal A existente (sector norte), un nuevo hall de
check in, otro espigón situado sobre la franja sur para cabotaje y un
amplio edificio para embarques y arribos. La aeroestación también
contará con un nuevo espigón internacional (refuncionalizado a partir
del existente), en tanto que el área destinada a estacionamiento tendrá
espacio para 4.500 autos.
El concepto estructural adoptado para la
obra en su conjunto es una grilla de hormigón armado de diez por diez
metros, con entrepisos sin vigas. Se eligió una tecnología de losas
aligeradas con esferas huecas de PVC (de 27 centímetros de diámetro) y
capiteles macizos reforzados. Esta elección permite desarrollar las
complejas instalaciones (aire acondicionado, electricidad, CCTV) en
forma simple y flexible.
Para 2013, por la terminal internacional
de Ezeiza pasarán alrededor de 13 millones de pasajeros que recorrerán
unos 186 mil metros cuadrados de plataforma, 21 pasarelas telescópicas y
200 puestos de check-in. Serán en total 140 mil metros cuadrados de
obra nueva, con 150 mil para nuevos accesos vehiculares y
estacionamientos y 5.500 de Salas Vip. El aeropuerto tendrá alrededor de
350 puestos y sistemas mecánicos, sumando ascensores, check-in,
migraciones, control de aduanas, carruseles de arribo y sistemas de
detección. Con un total de 21 mangas de embarque, Ezeiza recibirá
aviones de gran porte, como los enormes Airbus 380.